Llena de rosas mi herida,
llena de estrellas mis ojos,
llena de paz mis abrojos,
llena de gracia mi vida
y, de esplendor revestida,
ven a mí en la última hora,
a cerrar, consoladora,
mis ojos fijos en ti
y, vaciándome de mí,
lléname de ti, señora.
Oración.
Oras Señor, con manos unidas,
oras por los buenos, también por los malos,
somos todos tus hermanos.
Tú nos bendices con ojos cerrados.
Hay paz en tu gesto,
elevas al Padre jirones de llanto,
sufres por el hombre, la guerra y el hambre
que abre tus heridas y sangra tu costado.
Ay Jesús mío, te veo postrado,
orando en silencio por buenos y malos,
que el bueno sea ejemplo y que cambie el malo,
que tu amor nos cure de tanta desidia,
de tanto pecado, que hemos sembrado.
Amén.
Mª Rosa
Estoy perdida Señor.
Un mar oscuro me ha
cerrado los sueños,
necesito tu mano,
tu luz, para seguir andando.
Estoy a merced del viento,
mis piernas flaquean,
mis sueños se han ido,
sólo me queda pedir tu ayuda
para resurgir de nuevo,
a pesar de las burlas,
y del miedo.
Dame tu mano señor,
y tu gracia para seguir viviendo.
Amen.
Señor Jesús:
enséñanos a vivir tu Evangelio,
danos fuerza en la debilidad,
sé nuestra luz, bendición y guía.
Que la gloria de la Pascua
y con tu gracia, nos ayude a crecer en la fe.
Tú que venciste a la muerte
ayudanos a ser mejores
cristianos,
límpianos del egoísmo,
de la envidia, de la decidía,
y de todo lo que nos empequeñece como persona.
Te lo pedimos a ti que
vives y reinas por los siglos de los siglos,
amén.
SEMANA SANTA.
Preludio de la pasión, de la entrada triunfal
y la entrega con un
beso traicionero
Semana Santa;
Pilatos y la flagelación
la cruz en los
hombros
y el martirio.
Tu grito final y tu madre de pie frente a la cruz.
Tus discípulos, el miedo y el dolor
y la luz del domingo abriendo el cielo
y María Magdalena gritando:
¡El Señor ha resucitado!
Y la salvación sobre nosotros
y la vida nueva naciendo
desde la piedra rota del sepulcro.
Señor:
cómo afrontar
lo que no logramos entender.
Sólo tú
puedes ayudarnos,
a
deshilvanar el
mundo
que nos rodea.
Ábrenos
el camino hacia la luz,
la
verdad y el entendimiento.
Que en está cuaresma:
tu
gracia nos permita ver
la
realidad de ser cristianos.
Descubrir
el camino que nos lleva a ser luz y sal
no es
otro que salir de nuestro egoísmo.
Guíanos
Señor,
Tú eres
el camino, la luz y la vida:
¡¡Llévanos
a vivir una Santa Pascua!!
Virgen María, Llena de rosas mi herida, llena de estrellas mis ojos, llena de paz mis abrojos, llena de gracia mi vida y, de esple...
